Llegarás a mi vida, finalmente,
en un momento de desesperanza y desolación,
para iluminarme con tus ojos y tu sonrisa.
Llegarás cuando más solo me sienta,
para acompañarme en el torcido camino de mi vida.
Llegarás portando amor, pasión y deseo como regalos
y como los estandartes de nuestra unión.
Llegarás con las mangas arremangadas,
lista para forjar juntos un futuro
lejos de pasados y presentes inconsecuentes.
Cantando melodías nuevas,
recitando poemas insospechados,
llegarás.
Con el mazo de tus verdades,
a derrumbar las paredes de mentiras
que hoy me apresan,
llegarás.
Llegarás… llegarás…
¡Pero llega ya!
Que estoy cansado de esperarte…
Leave a Reply